A finales de febrero, la junta de portavoces del Ayuntamiento de Vélez-Málaga acordó por unanimidad de todos los grupos políticos presentes en el pleno municipal denominar al pabellón municipal de Vélez-Málaga con el nombre de Francisco Aguilar, cofundador del Club AMIVEL, referente nacional e internacional del Baloncesto en Silla de Ruedas, además de ser el primer entrenador del CB Axarquía, club con el que se estrenó la instalación deportiva hace ya 32 años. En este tiempo se ha nombrado Pabellón Municipal, a veces también como Pabellón Fernando Ruiz Hierro, que ciertamente designa a toda la instalación del Polideportivo Municipal veleño. Pero el pabellón como tal, no tenía nombre. Han pasado muchas legislaturas desde que en tiempo de Marcelino Méndez como concejal de deportes se inaugurara lo que era la primera instalación deportiva cubierta digna para la celebración de deportes polideportivos. Además, con una grada capaz de acoger unos 800 espectadores y que se estrenaba, no sin polémica, con un partido de baloncesto del recién creado equipo de baloncesto El Zoco de la Axarquía, patrocinador de un CB Axarquía que aparecía en la Primera Autonómica del baloncesto nacional. Un equipo que presidía el recordado Paco González junto a un buen número de aficionados al baloncesto, entre los que estaba también el propio concejal de deportes de entonces, y cuyo entrenador del primer equipo era un tal Paco Aguilar. La polémica surgió por no haber esperado una semana más para estrenar el pabellón con el máximo equipo representativo entonces del deporte en la ciudad, el CB Vélez Invedalsa que jugaba en 1ª División Nacional femenina. Desde entonces, si hay un equipo que ha paseado con creces el nombre de Vélez-Málaga en esa instalación, ese es el CD Amivel, orgullo veleño como el mejor equipo andaluz a nivel nacional en baloncesto en silla de ruedas y en todos esos años ha estado ligado al equipo Francisco José Aguilar Campos, conocido por todos como Paco Aguilar.
Este veleño que nacía allá por el 1959 formó parte de aquellos jugadores que hicieron grande al Club Ademi de Málaga con los Henares, Zurita y compañía, puntales de la selección nacional en aquella época, y donde militó también el desaparecido “Curro” Jiménez. Ambos, Curro y Paco, crearon en 1979 el Club AMIVEL, siendo Paco su primer entrenador, permaneciendo en el puesto prácticamente hasta la temporada 2018-19, pasando entonces a tomar el papel de director deportivo. Llevó al equipo desde la 2ª división a la División de Honor de BSR. Paco Aguilar siempre fue un ejemplo de superación sin duda ante las adversidades de la vida y particularmente he podido seguir su carrera deportiva a través de mi seguimiento en un gran número de retransmisiones televisivas en Velevisa TV y desde estas líneas de Revista TODO principalmente, en algunos de los más importantes logros del conjunto local de Amivel como aquel ascenso a División de Honor que se vivió de forma espectacular en una tarde-noche de sábado en directo en la televisión local u en otra ocasión en horario de mañana dominical. Son momentos mágicos que marcan también a uno en su vida. La alegría explosiva de un equipo que con muchos jugadores entonces de la comarca se hacía grande. Un grupo, el de Amivel, que también se fue poco a poco haciéndose grande en la sociedad veleña desde unas primeras reuniones celebradas a comienzos de los 90 en los salones de mi querida parroquia de Las Claras, en la calle popularmente conocida como de Las Monjas, y en un estado ahora deplorable de abandono, lastimosamente; cuánto se fraguó allí. Recuerdo aquella fiesta en Mercovélez donde los jóvenes que estábamos en los grupos de la parroquia ayudamos en la barra a sacar fondos necesarios para la constitución de la asociación como tal en 1992, más allá desde entonces del equipo de baloncesto. Hoy Amivel tiene su lugar en la vida de Vélez-Málaga y la comarca en defensa del colectivo de minusválidos físicos, y Paco Aguilar fue su presidente en los primeros 15 años, tomando luego el relevo Cristina Quintero, quedando como vicepresidente siempre Paco. Con su Centro Especial de Empleo, proporcionan puestos de trabajo a sus integrantes con el control y vigilancia de aparcamientos, realizan en su escuela-taller trabajos de carpintería de madera en general y sillería artesanal, trabajan también de forma artesanal la cerámica califal y realizan murales de información turística para la comarca, se encargan del transporte adaptado en furgonetas a aquellos que lo demandan, labores en el servicio de limpieza, gestionan aparcamientos municipales de zona azul… Una ventana abierta al colectivo de minusválidos en la comarca que además juega al baloncesto, además incluso de otros deportes adaptados. Y sin duda, el alma máter de todo esto es Paco Aguilar. Metido en familia, siempre admiré su energía a la hora de apostar en la vida. Entrenador recuerdo en colegios como El Romeral, en mi época escolar, era espectacular ver como daba toques al balón de baloncesto entre partido y partido con sus muletas sin que cayera al suelo. Además, si eras seguidor del fútbol aficionado, ahí lo veías apasionado como siempre gritando en la banda al frente de aquel equipo AS que representaba entonces al Barrio Nuestra Señora de los Remedios. Dirigía además un equipo infantil y juvenil entorno a este club veleño. A veces, con la emoción, terminaba cayéndose al suelo cuando su equipo marcaba un gol. Siempre comentó que se hizo entrenador de baloncesto del más alto nivel porque no se lo permitieron por su minusvalía en fútbol. Y desde entonces, ha formado parte importante de la historia del baloncesto en Vélez y su comarca. Fue uno de los primeros monitores del área deportiva del Ayuntamiento de Vélez-Málaga, en aquella fundación del Patronato Deportivo Veleño, especializado en baloncesto en las escuelas deportivas municipales en diferentes categorías desde el año 1980 hasta 1987. Vaya ambiente que se vivía en las pistas de Reñidero con aquel equipo cadete Polideportivo San Miguel que entrenaba. Un conjunto que puso los cimientos del CB Axarquía, que después estuvo en LEB Oro con la colaboración de Unicaja, del que fue su primer entrenador. Entrenador por tanto de la categoría senior del Club de Baloncesto Axarquía desde su estreno en el 1987 hasta el 1994. Tras aquellos años. compaginándolo con Amivel, decidió centrarse al 100% con este colectivo del que fue su primer presidente. A la par, en la vida, siguió ganando batallas como terminar los estudios de Magisterio y Pedagogía Terapéutica, conseguir sus oposiciones, encontrar el amor de su vida para casarse y formar también una familia con un hijo que destaca también, cómo no, en el baloncesto local. Ya no lo vemos con muletas porque sus brazos no le permiten esa movilidad, pero su trabajo ahí persiste.
Tras lograr el ascenso en varias ocasiones con el Amivel a la máxima categoría del baloncesto en silla de ruedas nacional, afronta otros menesteres en el deporte adaptado y así desde julio de 2003 y hasta junio de 2020 ha sido seleccionador andaluz de BSR y también se ha proclamado como entrenador, en diferentes ocasiones y distintas categorías, campeón de España de BSR. A nivel internacional, en 2003 fue nombrado entrenador de la Selección Española de BSR sub-22 y ayudante de las selecciones absolutas masculina y femenina. En 2004 consiguió la medalla de bronce en el Europeo sub-23, celebrado en Bélgica; en 2005 participó como segundo entrenador en el Mundial sub-23, celebrado en Birmingham, donde obtuvo un séptimo puesto; en 2006 fueron medalla de oro y campeones de Europa en Estambul y en 2008 Campeones de Europa en Adana (Turquía) con una generación que se dio en llamar los júniors de oro, con un veleño en sus filas, Jesús Romero, al que animó como maestro en su colegio a jugar al baloncesto a pesar de su minusvalía y que después se convertiría en un puntal nacional, llegando a disputar paralimpiadas con medalla en Río. En 2009, en el Campeonato del Mundo BSR sub-22 celebrado en Francia, su equipo resultó subcampeón. También tuvo su etapa como seleccionador nacional femenino. Retomó incluso su labor con el baloncesto de base local, aceptando la coordinación de la cantera del Clínicas Rincón Axarquía en una nueva etapa de su vida deportiva como director de cantera, desde 2010 a 2018.
Por todo ello, comprenderéis que no tengo ninguna duda en reconocer que, si alguien ha destacado con creces en el deporte de pabellón en Vélez, y es claro ejemplo además de lucha, constancia y superación en la vida, esa persona es Paco Aguilar Campos, segundo apellido que nos une en familia. Una persona que nunca ha buscado venderse. Quizás no se le ha sabido reconocer su labor en favor de otros fuera de su tierra, que también lo merecen. Pero aquí bien que lo sabemos y podemos asegurar que Paco ha puesto con su quehacer a la Axarquía en el mapa del baloncesto nacional, no sólo en silla de ruedas. En Vélez-Málaga, desde hace más de 40 años, tenemos el lujo de disponer de una actividad que para sí la quisieran en muchos puntos de España, además en la máxima categoría nacional. Son pocas las ciudades que pueden presumir de ello. En Vélez lo sabemos. Por ello, este reconocimiento a la persona de Paco Aguilar, también lo es para AMIVEL. Enhorabuena, Paco, y felicidades al consistorio por esta elección como nombre del pabellón del Polideportivo Fernando Ruiz Hierro que ya iba siendo hora de que tuviese un nombre.
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