La zamarraga, también conocida como rama negra, es una planta herbácea (terófito) escaposa, perteneciente a la familia Asteraceae, originaria de la región Neártica (Norteamérica) y puede alcanzar hasta 2 m de altura. Sus tallos, hojas e inflorescencias son bien pubescentes. Sus hojas inferiores (10-15 x 1,5-3 cm) son dentadas, las caulinares estrechamente lanceoladas (3-8 x 0,5-2 cm), generalmente dentadas, con los nervios laterales bien visibles. Flores en inflorescencias tipo capítulos agrupados en panícula larga, no glandulosa. Capítulos muy numerosos, cada uno con 120-200 flores externas femeninas, liguladas y 10- 20 flores internas hermafroditas, tubulosas. Flores liguladas filiformes de 3-3,8 mm con limbo de menos de 0,5 mm y las flosculosas o tubulosas de 2,8-3,8 mm. Fruto en aquenio (1 ,5-1 ,8) mm, provisto de un vilano (hasta 6 mm) blanco amarillento.
Suele encontrarse en cultivos, cunetas, cursos de agua en zonas agrícolas (acequias, canales, etc.), bordes de arroyos y ríos degradados, biotopos ruderales, etc. Florece desde julio a noviembre. Su reproducción es sexual. Su diseminación es anemócora (valíéndose del vilano), pero también se ha señalado una diseminación zoócora.
Los requerimientos ecológicos de esta planta son similares a los señalados para la especie anterior, del mismo género, pero parece que esta planta está mejor adaptada para suelos húmedos o encharcados, de ahí que la encontremos principalmente en agrosistemas de regadío, próximas a los canales de riego o acequias, tubos de goteo, etc., e incluso próxima a cursos fluviales (ríos y arroyos). No tolera las heladas ni las oscilaciones térmicas, tampoco la sombra densa y los suelos salinos, soportando vientos fuertes, sequías moderadas y, sobre todo, suelos encharcados.
Sus usos son similares a los señalados para la especie anterior, habiéndose usado en polvo por sus propiedades insectífugas y medicinalmente se le han atribuido tradicionalmente propiedades antirreumáticas, diuréticas uricosúricas, astringentes, antidiarreicad, digestivad, emenagogad, verífugad y antiinflamatoriad, usándose para diarreas, indigestión, bronquitis, resfriados, parásitos intestinales, hemorroides, estomatitis, faringitis, hemorragias uterinas, gonorrea, etc.
Actualmente no tiene ningún uso, siendo considerada una mala hierba.
Esta planta debió introducirse de forma accidental con semillas mezcladas con otras de cultivos. Su carácter invasor hace tiempo que quedó demostrado, extendiéndose preferentemente por agrosistemas en regadío. Por este motivo su impacto es principalmente económico, al competir con los cultivos por los recursos edáficos, de ahí que sea considerada como una mala hierba. El impacto ecológico no está bien estudiada en esta región, pero no se puede descartar el posible impacto de una hierba de tanta envergadura, que exige fuertes cantidades de nutrientes, entrando en competencia con especies ruderales y arvenses autóctonas como Cardaría draba, Dittrichia viscosa, Piptatherum miliaceum, etc.
Actualmente se ha citado en gran parte de la región andaluza, buscando siempre las zonas cálidas (especialmente las costeras y valles más térmicos) donde abundan los cultivos de regadío, llegando a espacios naturales protegidos como el Paraje Natural de los Acantilados de Maro-Cerro Gordo, por la proximidad de los cultivos de Maro.
Para su control se recomiendan tratamientos químicos y físicos, en función de la situación de las poblaciones. En cultivos, y a nivel de parcela, puede lograrse un cierto control mediante prácticas culturales (laboreo, siega, escarda manual) en ocasiones concretas (pequeñas parcelas, cultivos de frutales, baja densidad poblacional, etc.). En las restantes situaciones puede recurrirse al empleo de diversas materias activas (herbicidas) con las debidas precauciones. A nivel de parcela el control tiene un grado de dificultad bajo, pero a mayor escala, como un espacio protegido o la región, se considera extremo, imposible de abordar, limitándose a pequeñas actuaciones en lugares donde se amenace a comunidades o especies vegetales de valor científico y ecológico.
Deja una respuesta