Difícilmente me encontraré de nuevo con una familia tan estrafalaria como la que hoy os presento.
Frente al Peñón de Gibraltar, en la linda ciudad de la Línea de la Concepción, cuatro mujeres cumplen sus primaveras en un continuo fluir diario de simpatía, locura y amor.
Ellas son” las Ñeco”. La matriarca del Clan: doña Nani; viuda de Jerónimo Ñeco y natural de Tanger, es de esas abuelas a las que podíamos definir como “hippie-yayas”.
Posiblemente sea la más divertida, libre, directa y sin prejuicios de todas.
Vestir es jugar y eso es lo que debe pensar la veterana del clan cuando elige colores intensos y complementos que son llevados más bien con la intención de sacarle una sonrisa a los que la rodean y a ella misma, que de dar en la tecla exacta y rigurosa de los preceptos artísticos de la moda actual.
Nani ríe, gasta bromas y se divierte llevando la alegría por bandera y la tranquilidad como religión. Mucho han visto sus ojos y vivido su ser.
Raquel, sin embargo, la mayor de las hijas, aún no ha traspasado y no tiene la intención de hacerlo, la barrera de la tranquilidad del pasotismo y el conformismo que la veteranía y el paso del tiempo proporciona. Activista en cualquier tipo de organismo que defienda las libertades, los derechos humanos, la protección del medioambiente y las políticas sociales, esta Ñeco de raza y expresión contundente, no cesa en la lucha por el bienestar y la justicia.
Cabe destacar que, pese al tiempo que invierte en sus acciones solidarias, su alma gaditana revienta de arte obligándola a tener entre sus aficiones la creación de esculturas que representan la belleza encontrada en la sensibilidad artística representada en la imagen de mujeres “rellenitas”; una gran pasión que la trae y la lleva ,dejando por el camino verdaderas obras de arte de gran impacto visual y simpatía.
Gema sin embargo, no tan activista pero igual de sensible o más, es un show ella misma; una pieza artística tragicómica real y pensante. La más abstracta de las Ñeco, vive riendo y ríe viviendo.
Mediana de las hermanas y primera en la locura continua de ser genial analiza, cuestiona, supone, advierte, imagina, sueña , compara, relaciona e invoca cualquier manifestación que se haga durante un intercambio comunicativo , donde ella, a ratos, deja de ser emisora o receptora para convertirse en contexto . Cuando Gema aparece y toma la palabra para hablar o “cantar”, la calle se convierte en escenario y, casi sin darnos cuenta, una posiblemente secreta y retenida vocación dramática hace gala de las mieles más dulces que existen en las profundidades del ancestral universo artístico: la expresión y creación popular inconsciente, espontánea y natural del verdadero “artista de nacimiento; aquel con personalidad compleja o sencilla ,sentimentalismo acentuado , léxico propio, obsesiones claras y pretensiones lúdicas.
La benjamín, Carmen, es la más convencida de sus dotes creativas e interpretativas y la más consciente de la intención social del arte y la cultura como medio superior y primordial de la educación de una sociedad; independientemente del país que se trate. Es quizás aquella que nutrida de su ambiente infantil, juvenil, adulto, social, intelectual o familiar ha conseguido no solo nadar en las aguas del universo interpretativo sino preocuparse por conocer, dominar y perfeccionar los mecanismos y las técnicas de su género, contribuyendo además en la formación de otros y en el diseño de programas y actividades lúdico-artísticas para la introducción teórica y práctica de los más pequeños y los no tanto, en el ámbito escénico.
Presentadas todas ellas solo cabe decir, que unidas y en un mismo espacio físico resulta intenso y artístico el ambiente que se genera y que junto a ellas, las calles de La Línea de la Concepción se tornan más justas, dicharacheras y especiales.
Quien conozca a “las Ñeco” sabrá que son inconfundibles, irrepetibles y acogedoras y que siempre tienen para todos y todas palabras sinceras, cariño y alegría.
Las Ñeco se tragan sus penas y no dejan que éstas acaben con ellas. La vida es el hoy y el mañana y en esa filosofía pasan los días alejadas de la nostalgia, el análisis de lo pasado y centradas y entregadas en la construcción de un mundo mejor; donde todo el mundo es tratado con amor, respeto y solidaridad.
Ellas son “las Ñeco”, y sin duda, deberían conocerlas pues son, sin duda alguna, una especie en extinción.
Fotografías: Pepón Martín.
Sonia dice
Wauuuuu yo sólo conocí una maravillosa noche a Carmen y me enamoró… Ahora todo el CLAN ÑECO