Si hay una realidad que sea visible y reconocida popularmente por encima de todas, esa es que Andalucía no es solo una tierra de tesoros históricos sino de cultura viva en constante evolución y práctica así como una gran experimentada en la conservación y mimo de todo aquello que pudiera considerarse manifestación artística tradicional; esto es, una gran y constante fábrica de artistas naturales.
En el rincón del mundo en el que el arte, la cultura y el buen humor se regala por las calles de forma natural, espontánea y desinteresada, salen a la luz cada cierto tiempo perfiles que llevan el arte tan profundamente arraigado en su personalidad que son reconocidos como artistas de valía en cuanto se les escucha, se les ve, o se les trata.
Si hay una joven voz malagueña actual, de entre el flamenco y el folclore a la que destacaría por su quejido y duende , esa sería la voz de Patricia García.
Su participación y victoria en el programa de Canal Sur, Yo soy del Sur Peques y su gran sentido del compás así como su dramatismo tímido pero intenso y real, han sido los únicos culpables de mi reciente interés por Málaga. Hasta entonces, el paisaje o geografía de mis ambientes literarios había sido un núcleo formado exclusivamente por el eje Cádiz- Sevilla, al que más tarde le añadí Huelva, por su espíritu rociero.
Patricia, o mejor dicho, su voz y sus interpretaciones, me han hecho fijarme en Málaga e interesarme más por tener contacto con una tierra que es tan hermana de la mía como otras a las que dedico versos con regularidad.
Por todo ello, hoy mi rincón andaluz no puede sino rendirse ante la explosión de sensaciones que oírla causa para, con estos fandangos, homenajear a la que estoy seguro, conquistará a cuantos la oigan independientemente del éxito que tenga o la repercusión que alcancen sus interpretaciones a lo largo de su carrera como artista.
De esta forma ha pasado de ser una solo una gran voz malagueña a convertirse también en foco y motivo de alguna de mis creaciones literarias como ésta.
FANDANGOS O MALAGUEÑAS DE TU VOZ FLAMENCA
I
Niña de Torre del Mar,
que tu gente ya te espera,
hoy brillan más las estrellas,
solo por oírte cantar ;
cantar por Málaga vieja.
II
Tu voz llora y no se ahoga,
envidia de Andalucía,
eres Patricia García,
la que detiene las horas
desgarrando el alma mía
III
Ayer me dijo la luna,
que le ha dicho Federico,
que unas coplillas ha escrito
en una sutil locura
Patricia, “pa” tus ojitos.
IV
Viéndote cantar se alegran
pájaros de la mañana
Cádiz, Málaga y Triana
viendo en ti “guardá” la esencia;
tu cante por sevillanas
A Patricia García, por compartir con todos el duende de su cante.
Fotografía cedida por la familia de Patricia García.
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