Cuando hablamos de la Navidad nos imaginamos una época llena de luces, de reuniones familiares y amigos, días libres y regalos. Es una época muy importante del año y mucha gente la vive con ilusión y alegría. Pero también hay muchas personas que rechazan la Navidad, no les gusta nada todo lo que rodea a estos días festivos e incluso se sienten más tristes esperando que pase pronto.
¿Cómo afrontar de forma positiva la Navidad? Deberíamos mantener durante todo el año una actitud de normalidad y de disfrute. En este caso, podemos sentir que se nos presentan unos días un poco especiales pero nada más. No deberíamos dar demasiada importancia a ciertas cosas, lo mejor es ser naturales y vivir con normalidad.
A la hora de enfrentarnos a las temidas compras navideñas y los regalos, también debemos relajarnos y organizarnos adecuadamente. Lo más sensato es que cada persona se adecúe a su bolsillo y sus posibilidades. No por gastarnos más dinero o comprar el juguete más grande vamos a hacer a los niños más felices. Afortunadamente, tenemos infinidad de opciones para regalar, y debido a la competencia comercial los precios son bastante asequibles. Es mejor tener un detalle personalizado que gastarte mucho dinero y quedarte el resto de las semanas con problemas económicos. Te animo a que seas original y te decantes por otro tipo de detalles pensando en la persona a la que regalas más que en ti mismo. Te sorprenderías mucho del efecto que puedes causar en los demás con detalles como unas galletas hechas en casa con la inicial de la persona a la que regalas, o un pequeño álbum con fotos especiales de esa persona, o un libro dedicado…en fin, infinidad de ideas que van a hacer sentir al que recibe el regalo que es alguien especial.
Podemos también sentirnos agobiados por la cantidad de reuniones a las que tenemos que asistir en sólo dos semanas, es gracioso, como si el resto del año no pudiésemos quedar con esos familiares y amigos. ¿Te das cuenta cómo el ser humano se toma tan en serio algunas tradiciones? Si no puedes quedar a comer el día 30 pues intenta ver a esa amiga querida o a ese compañero que hace años que no ves en otro momento del año…
La peor parte de la Navidad es lo mucho que se echa de menos a los seres queridos. Será que al haber una cantidad de reuniones familiares mayor que en otras épocas, se hace más notable la ausencia de los que ya no están. Es normal sentir tristeza y añoranza por las personas que faltan, pero si lo piensas, esa ausencia está ahí dentro de ti durante todo el año. Lo mejor para tu equilibrio emocional es dejar que fluyan esas emociones, no las evites, pero piensa también que tú sigues aquí y hay personas a tu alrededor que te quieren y necesitan. Intenta disfrutar de los pequeños momentos de felicidad, de esa manera, no sólo honras el recuerdo de tu ser querido sino que también valoras tu vida, que no se te olvide, todos tenemos fecha de caducidad.
Otro tema espinoso en estas fechas tiene que ver con las reuniones familiares y de amigos que mencionaba anteriormente. ¿Qué pasa cuando nos reunimos más a menudo y con un mayor número de personas? Pues sí, a veces saltan chispas y los conflictos están casi asegurados. ¿Qué podemos hacer? Si sabes que en esa cena o reunión te vas a encontrar con esa o esas persona/s que te sacan de quicio, lo más sano y equilibrado mentalmente es hacer un trabajo personal anteriormente. Todos tenemos personalidades y circunstancias diferentes, además de que ante una misma realidad, cada persona tiene una percepción distinta. Así pues, debemos acostumbrarnos a que no nos sintamos igual de a gusto con todo el mundo. Partiendo de esta base, podemos también despersonalizar los comentarios de los demás, es decir, no tomar como algo personal lo que los demás dicen o hacen. Cuando una persona se siente mal, triste, enfadado, frustrado…a veces, necesita que los demás también se sientan de forma negativa. Una manera de protegerte de este tipo de actitud es, cuando hagan un comentario que no te guste, piensa que esa persona realmente no puede hacerte daño, porque aunque puede que lo intente, tú estás por encima de eso y no vas a alimentar un círculo vicioso dañino que te perjudica primero a ti y después a los demás. Muchas veces, ignorar ciertas actitudes es lo más sano, y además esa persona se siente descolocada porque ha intentado dañarte pero la respuesta ha sido la indiferencia.
En otras ocasiones, sentimos que debemos contestar o explicar cómo nos hace sentir algo que nos daña. Si sientes que te encuentras en un momento así, respira hondo, piensa en lo que vas a decir e intenta mostrar un tono de tranquilidad, incluso si vas a decir, oye, eso que has dicho me ha dañado y no creo que sea el momento de hablar de ese tema, por ejemplo. El autocontrol personal es muy importante y nos ayuda a mejorar las relaciones con los demás y a sentirnos mejor con nosotros mismos.
Desde mi punto de vista, es bonito que sintamos esta época con todo lo bueno que nos puede ofrecer, el ambiente festivo, los adornos, los días de vacaciones, en fin, disfrutar de todo lo bueno que nos ofrezca la vida y vivirlo todo a tope, para que cuando tengamos malos momentos recordemos lo felices que hemos sido y que intentaremos seguir siendo. Feliz Navidad!!! Y que disfrutéis mucho, mucho, mucho con una mente positiva llena de alegría.
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