Siempre es un momento difícil cuando decidís llevar a vuestro bebé a la guardería, llega la hora de separarse y asaltan las dudas y remordimientos. El periodo de adaptación es el proceso durante el cual el niño se integra en la vida escolar y termina cuando el niño asiste con normalidad, viéndolo como una situación cotidiana y regulando su actuación en el centro.
Para afrontar este momento con la máxima tranquilidad es conveniente prepararlo con antelación, sobre todo en encontrar la guardería adecuada. La mejor guardería es aquella que se acerca más a vuestras ideas de educación para vuestro bebé, debe ser una continuación de la educación en casa. Por ello es bueno visitar los diferentes centros infantiles, así como asistir a las reuniones que podamos, y pedir cita si es necesario para hacer preguntas sobre vuestro interés.
La entrada a la escuela es vivida como un momento difícil, ya que supone la separación del seno familiar donde los niños son centros de atención y se sienten protegidos y seguros, para adentrarse en un entorno diferente y más amplio de relaciones, lo cual puede producirles angustia y sentimientos de abandono.
Como hacer para una mejor adaptación
Debemos tener en cuenta que para nuestros pequeños el cambio es referido en muchos niveles, adaptación tanto al espacio como al ruido, a la voz de un nuevo adulto, como a nuevas costumbres, por lo que este proceso está lleno de avances y de retrocesos siendo muy importante la tranquilidad y la paciencia.