Creo que es más que justo dedicar mi artículo de este mes a esa parte tan importante en la terapia tanto de logopedia como de cualquier otra especialidad, a una base fundamental para que todo funcione más allá del ratito que se viene al gabinete, de ese entorno donde se generaliza lo que se aprende: estoy hablando de la familia.
Son un pilar fundamental en el desarrollo y avances de cualquier paciente, y hablo de las familias de niños con dislalias, de las familias de pacientes afásicos o con discapacidades motoras, de las familias de los niños con disfemia, con retraso mental, con disfagia, con trastorno del lenguaje, con cualquier tipo de problemática.
Es importantísimo que la familia refuerce y ofrezca al paciente un entorno positivo, de aprendizaje. Son el mayor apoyo en la terapia y un aliado nuestro para que todo avance se haga estable. Es importante informar a las familias de los métodos a seguir desde un principio, de la necesidad de su colaboración, de la importancia que tienen dentro de todo el proceso y elogiar todo lo que hacen pues gracias a ellos, a sus esfuerzos y sacrificios muchos pacientes avanzan mucho más rápido, con más optimismo y con más facilidad. Debe ser un proceso guiado y tutorizado, por así decirlo.
Es increíble el poder que tiene el entorno dentro de una patología cualquiera, sea cual sea. No tienen más mérito unos que otros, cada caso y cada familia es única y tienen su propia historia, por lo que debemos de respetar sus emociones, tratarlos con delicadeza y coherencia, y lo más importante, poniéndonos en su piel, y en la de la persona que necesita de nuestra ayuda, pienso que si no intentamos, aunque sea un poco interiorizar el problema nos costará mucho más trabajo saber las necesidades que existen en cada momento.
No puedo decir que la familia sea la clave para la recuperación de forma total pero sí que juega un papel demasiado importante como para no atenderlo como se debe. Hay momentos en los que los familiares se derrumban, y puedes hacer de psicólogo en más de una ocasión, necesitan también ser escuchados, y al igual que el propio paciente necesitan ser informados, tener pautas y una base firme para no equivocarse. Investigan por Internet, cosa que no siempre es recomendable, se interesan y muestran todo el apoyo posible y eso es lo más positivo. La colaboración que existe es el epicentro de todo.
Los familiares junto con otros ámbitos como el colegio, el trabajo, las actividades extraescolares, etc. Son escenarios en los que el paciente debe seguir poniendo en práctica lo aprendido y eso solo si ese entorno está reforzado y trabaja en colaboración cuando nos damos cuenta de lo importante que es para que el paciente avance.
Aitor dice
Tan profesional y eficiente nuestra querida 🌹.
Y es que esta chica se hace de querer !
Con el cariño que procesa a todos los niños y a sus familias.
Por eso, desde este lado de las familias quiero darte las gracias porque no siempre es fácil ni para las familias ni para los especialistas..
Muchos besos guapa !!