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Estamos hartos de ver este mensaje cada vez que entramos a una web por primera vez o en cualquiera de nuestras webs habituales cada vez que limpiamos los archivos temporales de nuestros navegadores.
Pero, ¿sabemos lo que son y por qué están legisladas a nivel europeo? ¿Son efectivas? ¿Son invasivas?
Antes de empezar las definiremos según Wikipedia (es la definición más correcta que he encontrado después de mucho buscar):
Una cookie, galleta o galleta informática es una pequeña información enviada por un sitio web y almacenada en el navegador del usuario, de manera que el sitio web puede consultar la actividad previa del usuario.
Sí, cookie significa literalmente GALLETA.
Aparte de guardar los datos de inicio de sesión de nuestros lugares que lo requieran, como redes sociales, cuentas de correo, plataformas de compra, etc., guardan pequeñas cadenas de información sobre nuestras acciones de navegación, ya sean sitios que visitamos, productos que miramos y sus categorías, etc.
Esta recopilación de datos puede ser leída de nuevo por cualquier sitio que visitemos con nuestro navegador, ya sea la web que ha escrito en la cookie o la siguiente web, por lo que, si por ejemplo hemos estado mirado frigoríficos en el Corte Inglés, cuando entremos a Facebook, los anuncios que encontraremos serán sobre frigoríficos.
Además, algunos sitios de internet las usan para que nuestra navegación sea lo más satisfactoria posible además de ofrecer una experiencia personalizada, como ocurre con la anteriormente mencionada Wikipedia. Por ejemplo: Si hemos indicado que nuestro buscador por defecto es Google, y que queremos ver 30 resultados por página, Wikipedia usará esta información para ofrecer el mismo aspecto ya que se entiende que usuario está más cómodo con esa configuración.
Algunos tipos de cookies son: Cookies propias o de terceros, Cookies de sesión o persistentes, Cookies técnicas, Cookies de personalización, Cookies de análisis, Cookies publicitarias, etc.
Otra gran función de las cookies, para mí la más útil, es la recopilación de datos de navegación de los usuarios. Con estas recopilaciones los BIG DATAS de los buscadores consiguen predecir las tendencias de navegación, y, en teoría, darnos unos servicios menos invasivos, más concretos y más funcionales a los usuarios finales; y digo en teoría porque la mayoría de las veces estos datos se usan para mover el mercado por las grandes empresas a placer y conveniencia, incluso, a ojos de los mas conspiracionistas, llevar al ser humano de la mano a lo que a estas multinacionales les interesa.
Para que no haya error en esto, hay que tener en cuenta QUÉ NO ES UNA COOKIE:
– Las cookies no son similares a gusanos o virus que pueden borrar datos de los discos duros de los usuarios.
– Las cookies no son un tipo de spyware porque pueden leer información personal almacenada en el ordenador de los usuarios.
– Las cookies no generan ventanas emergentes.
– Las cookies no se utilizan para generar contenido basura.
– Las cookies no solo se utilizan con fines publicitarios.
– ¿Os parece peligroso? En cierto modo lo es ya que se puede saber en ciertos momentos datos de los usuarios que, a lo mejor este no desea que se den a conocer.
Muchas webs te dan la opción de no continuar con las cookies pero automáticamente te sacan del site porque sin esta funcionalidad no se mostrarían correctamente.
Para que esto último “no pase” en Europa se creó la Ley Europea de Cookies aunque en realidad no existe como tal, sino que forma parte de la LSSI, Ley de Servicios de la Sociedad de la Información, que fue modificada por el Real Decreto-Ley 13/2012 de 30 de marzo para adaptar nuestra legislación a las directivas comunitarias relativas a las comunicaciones electrónicas dentro de Europa.
Para cumplir esta ley hay que informar y pedir el consentimiento al usuario antes de que las cookies se copien en su navegador.
El pasado 13 de septiembre de 2013, se aprobó en las Cortes Generales el Proyecto de Ley General de Telecomunicaciones, que incluye una nueva modificación de la Ley 34/2002, de 11 de julio, de Servicios de la Sociedad de la Información y de Comercio Electrónico.
Las primeras sanciones por el incumplimiento de esta ley fueron a dos empresas (españolas), son sancionadas por usar en sus respectivos comercios electrónicos, Google Analytics, Google Maps, Youtube, WordPress y Zopim, entre otros, instalando cookies de estos servicios sin cumplir la Ley de Cookies. Las multas fueron de 3.000€ para la primera empresa y de 500€ para la segunda. La Resolución fue la R/02990/2013.
Entonces ¿son peligrosas o no? Pues depende.
Personalmente a mí no me gustan ni poco, ni mucho, ni nada. Me parece un poco abusivo su uso según en qué casos, pero es cierto que algunas de ellas son muy útiles, sobre todo si hablo desde el punto de vista del E-commerce al que me dedico asiduamente, ya que las Cookies de Google Analytics y Google Search Console ayudan a ver las tendencias de navegación de los usuarios en tu web, pudiendo así reforzar los puntos débiles de tu negocio, ver los productos más visitados y observar qué páginas fallan o donde dejan de navegar los clientes.
Además, se reflejan los tipos de dispositivos desde los que los clientes se conectan, sistemas operativos, navegadores, etc.
Si todo esto se usa de una manera correcta y no invasiva, no debe de haber problema. Otro tema distinto es si ya los datos son más sensibles o menos.
¿Tú qué opinas?
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