Si habéis estado atento a las noticias en las últimas semanas, seguro que muchos de vosotros conocéis la polémica que se ha originado en torno al último teléfono de la marca coreana Samsung. Exacto, estamos hablando del fatídico Samsung Galaxy Note 7.
El Origen
El los últimos años, las marcas han acostumbrado a fijar fechas más o menos consistentes para los anuncios de sus teléfonos: Apple lo suele hacer en verano, aunque poco a poco lo han ido retrasando y ahora lo hacen en Septiembre. Samsung elige casi siempre la primera mitad del año para sus Galaxy y la segunda mitad para los Galaxy Note, aunque desde la empresa coreana existe la tendencia de adelantar las fechas.
Desde varios foros de rumores en Internet, se hacia eco la posibilidad que este año el iPhone de septiembre fuera bastante aburrido, nada fuera de lo normal, ni nada revolucionario. Los altos ejecutivos de Samsung intentando ganar a Apple en la carrera de las ventas hicieron un movimiento arriesgado: adelantar la salida del telefono a comienzos de Agosto para disponer de ventaja.
Y este amigos, es el origen de todo mal: apresurar un ciclo de trabajo ya de por si en el límite de las fechas de entrega para todas las partes.